jueves, 29 de mayo de 2014

X-Men Días del Futuro Pasado

La Madeja del Gato (geek)
Madeja #266
Por Christopher Vergara

Aunque Stan Lee creó a los X-Men en 1963, estos no tuvieron verdadera relevancia en el mundo de los cómics hasta que en 1975, Chris Claremont se hizo cargo de los guiones de los mutantes, reinventándolos, volviéndolos un éxito en crítica y ventas y estableciendo la mitología de lo que hasta la fecha de una de las propiedades más ricas y diversas de Marvel Cómics, el universo mutante. 

Claremont, a lo largo de dieciseis años, creo decenas de personajes, y contó cientos de historias que definieron la mitología mutante. Convirtió a aquel grupo de muchachitos con poderes extraños en un discurso sobre la segregación y la discriminación por ser diferentes. Un discurso que hasta la fecha tiene resonancia entre cada vez más grupos distantes en apariencia entre si. No sólo convirtió a los X-Men en icónos y héroes, transformó a Magneto de un villano común y acartonado en un villano trágico, más cercano a al arquetipo de antihéroe. 

Claremont además llevó a los X-Men a lugares inimaginables, los llevo al espacio, los hizo viajar en el tiempo, los hizo conocer los orígenes mismos del Universo. Dos, son las historias clásicas por antonomasia de Claremont y de los mutantes en general. La primera, la Saga de Dark Phoenix, una tragedia sobre la naturaleza humana de sobrecogedoras consecuencias, la segunda, Días del Futuro Pasado, una bella fabula de viajes en el tiempo que busca evitar catastrofes mayores, con la duda de si realmente se estarán evitando. 

Esta última historia (la saga de Dark Phoenix se encargó de mal contarla Brett Ratner en X-Men The Last Stand) es la que sirve de marco para Días del Futuro Pasado, la séptima entrega en la franquicia de los X-Men y que de alguna manera sirve como un reboot o revival (anunciado así en la publicidad pero también confirmado en pantalla), tras que los bonos de la franquicia cayeran desde 2009. 

Fox y la productora ejecutiva de la saga, Lauren Shulen Donner, realmente se esforzaron en revivir a la franquicia que daba francos signos de agotamiento, en especial compitiendo en un mercado donde los superhéroes son una cosa común y corriente y The Avengers de muchas formas ha marcado un parteaguas en el género. Para ello, reclutaron a Bryan Singer, director de las primeras dos cintas y arquitecto de la exitosa reinvención que significó el arribo de la franquicia al cine en 2000, cuando se volvió una bocanadade aire fresco. 

Tampoco es que haya resultado realmente complicado convencer a Synger de regresar. Abandonó la franquicia en 2005 tras dirigir X2 para dirigir una irrelevante secuela de Superman que ni a Warner le gustó, otra irrelevante película de guerra en Valkyrye y finalmente una espantosa versión de Jack el gigante en versión violenta que fracasó. Synger de muchas formas necesitaba regresar al orígen y vaya que lo hizo bien. 

Fox también fue lo suficientemente inteligente para integrar o fusionar sus dos universos mutantes, el del presente y el del pasado. Para ello contacto y contrató a Patrick Stewart, Ian McKellen, Halle Berry, Ellen Page, Shawn Ashmore, y hasta Famke Jansen y James Marsden de refilón. Y los integró con el elenco de First Class que de cualquier forma ya estaba bajo contrato: la ahora super estrella Jennifer Lawrence, Michael Fassbender, James McAvoy y hasta un desaprovechado Lucas Till. Uniendo como enlace se utilizo al longevo Hugh Jackman como el aun más longevo Wolverine. 

En lineas generales, la versión filmica es bastante fiel al original de Claremont. Se realiza un viaje en el tiempo con el objetivo de evitar un asesinato y con ello evitar desencadenar una caceria mutante que terminará por en los hechos extinguir a la humanidad a manos de los brutales Centinelas. Algunos datos cambian, en el cómic quien viaje es Kitty Pride (lo cual en el cómic es factible pues viaje en promedio unos treinta años, aquí son cincuenta), y a quien se busca evitar asesinar es a Robert Kelly, mientras que en el filme es Bolivar Trask (ambos unos hijos de perra, aunque Kelly muchos años después se redimió). En ambas versiones Mystique es la asesina, aunque la versión filmica tiene un contenido un tanto más sentimental. 

En términos filmicos. Días del Futuro Pasado es realmente una gran película. El futuro que muestra es completamente desolador pero creíble (más adelante hablaré de los desvaríos cronológicos que se han generado), el pasado setentero que recrea es francamente delicioso y creíble, con todo y su modo muy Nixoniano. Las actuaciones son fantásticas (es realmente agradable la forma en que se logran embonar dos personajes tan disimbolos como el Charles del presente y el del pasado), Fassbender y McKellen son realmente muy geniales en sus papeles. 

Lawrece en general me sigue generando opiniones mixtas, su papel en general no es malo, pero es muy blando en comparación con la Mystique que nos regaló Rebeca Romjin (entonces Stamos) que era la mujer despiadada y frenética que debe ser el personaje. Entiendo que hay fines dramáticos que el personaje buscan cumpla pero de cualquier forma, con todo y el gran reset que hace la película, la desconexión se siente. 

El resto del elenco, la verdad sea dicho tiene participaciones muy pequeñas aunque simbólicas. La presentación de (esta versión) de Pietro Maximoff (interpretado por Evan Peters) es realmente simpática. Los X-Men del futuro son carne de cañón pero es simpático ver otra vez a Iceman (el buen Bobby), a Kitty Pryde (quien tiene un digno rol como la encargada de que todo viaje), obviamente Storm con todo y su sacrificio y hasta la muy útil Blink. De los personajes del pasado, triste el muy pequeño rol que juega Alex Summers (Havok o el guapisimo Lucas Till) y como muchos de los chicos de First Class fueron olimpicamente sacados de la película con el argumento de que los mataron. 

El guión, pese a todo el caos argumental que propone y hace en general está muy bien escrito y resuelto. Escrito por Simon Kinberg (el que hizo el guión de The Last Stand y Sherlock Holmes) con historia del mismo Kinberg, junto con Matthew Vaughn y Jane Goldman (director de First Class y escritores ambos del mismo filme), en general la historia fluye bien, logra diferenciar ambos tiempos y logra darle un buen equilibrio a personajes, momentos y dramas. 

Con base en sus últimos trabajos como director, sinceramente no apostaría a decir que Bryan Singer es buen director, pero cuando menos es un buen director de la saga mutante, y sinceramente esto se muestra en el filme. Una dirección medida, centrada, llena de guiños, que profundiza y humaniza aun pese a lo increíble o fantástico de las situaciones. Ese era el punto que más me hacía dudar de Synger, su capacidad de dirigir una cinta netamente de ciencia ficción. Sus dos entregas de X-Men son las más contenidas y terranales de la franquicia. Sin embargo, el ahora envuelto en escandalos director muestra dominio y habilidad para dirigir una película tan argumentalmente compleja. En manos de un director incompetente esto hubiera acabado como un desastre (recordemos la misma The Last Stand, Spider-Man 3 o Watchmen). 

Días del Futuro Pasado además funge como un reboot de la franquicia entera. Por los viajes en el tiempo y la continuidad que plantea al final del filme, en los hechos invalida todo lo visto en X-Men The Last Stand reestableciendo una continuidad en el presente donde Jean Grey, Scott Summers y Charles Xavier siguen vivos y felices. Lo cual sienta las bases para un eventual filme de X-Men que retome la linea de tiempo abandonada en 2006 (imagino que Fox habrá sido inteligente para firmar al elenco por al menos tres películas). Ojalá en algún futuro veamos a Dark Phoenix como se debe y a Jean Grey morir con dignidad, suicidandose, como debe ser. 

Fox de alguna forma realizó un reboot de su franquicia sin necesidad de empezar desde cero como Sony con Spider-Man. De ahora en adelante serán más frecuentes sus películas, pues al igual que Sony están en la situación de que de no producir nuevos títulos los derechos se revertiran a favor de Marvel, es decir, Disney. A diferencia de la saga de Spíder-Man la cual me despierta ya severas preocupaciones, o del desastre que parece encaminarse a ser la nueva versión de los Fantastic Four, X-Men parece estar en buenas manos. En tanto sigan un camino tan afortunado como éste, las cosas irán por buena camino. Sean inteligentes y no maten a la gallina de los huevos de oro. 

Días del Futuro Pasado es una divertida cinta de acción que reinvindica el rol de los X-Men como una metafora de los marginados sociales, de los diferentes. Es además, es una bella reflexión sobre los riesgos de la discriminación, y de como el odio puede conducir a la humanidad por caminos francamente aterradores. El miedo y el odio sólo generan más miedo y odio. 

El Último Hilo: Entiendo que es porqué son productores, pero, ¿enserio?, ¿los logos de Bad Hat Harry Productions, productora de Synger y TSG Entertainment antes que el de Marvel? Entiendo que Fox y Disney no se llevan de lujo como Disney y Sony, pero caray. Cortesías, cuando menos. 

Y en la próxima madeja: Review de Maléfica.

lunes, 26 de mayo de 2014

Glee, temporada 5

La Madeja del Gato (gleek)
Madeja #265
Por Christopher Vergara

El pasado 13 de mayo concluyó en Estados Unidos (en América Latina lo hará el próximo 29 de mayo), la quinta temporada de Glee, en su capítulo veinte. Una temporada muy caótica en términos de producción, que se vio mermada en su orden original derivado de la completa recalendarización que significó la muerte de Cory Monteith, y que en términos generales tuvo como característica una baja espantosa en los números, en especial los de los 12 capítulos estrenados en 2014 cuando retomó su día de transmisión de los martes, tras mucho tiempo de estrenar episodios los jueves.

Siendo honestos, Glee ya no es relevante. Glee dejó de ser relevante probablemente desde la tercer temporada. Pero ello tampoco es malo. Si, se fueron el ruido, el estruéndo, el éxito abrumador y la locura del principio, pero en términos amplios, Glee sigue siendo una fantástica comedia música, con divertidos personajes, grandes canciones y temáticas ampliamente atractivas y relacionables con su audiencia principal, adolescentes y jóvenes adultos. Se habrá ido la pompa y circunstancia, pero el corazón permanece.

Ésta quinta temporada estuvo dividida en dos segmentos o bloques. Los primeros trece episodios que dieron cierre al año escolar iniciado en la cuarta temporada (el año escolar más largo en la historia de Glee), hasta llegar a las Nacionales, graduación y desbandada de New Directions, mientras que los restantes siete episodios, basados exclusivamente en Nueva York se encargaron de darle un nuevo set up a los personajes, en especial nuestros queridos protagonistas que viven en Nueva York.

Es así que tuvimos grandes capítulos como ese especial de arranque de la temporada en homenaje a The Beatles, que trajo como consecuencia el que Blaine y Kurt se comprometieran a casarse (ya luego vendrían muchas pruebas a esa relación). Obviamente el capítulo dedicado a Cory Monteith que abordó la muerte del personaje de Finn Hudson, capítulo que reseñamos y seguimos considerando extraño cuando menos.

Tras ello vendrían episodios realmente fantásticos como A Katy or a Gaga que representó un genial enfrentamiento entre el pop clásico y sus versiones más oscuras, o The End of Twerk, donde Glee se subió a la moda del twerking para hablar de lo dañino que pueden ser los estereotipos o las exageraciones sociales ante aquello que se considera impropio o indebido.

Uno de mis episodios favoritos fue Movin' Out, el episodio homenaje a la música del gran Billy Joel que no regaló fantásticas reflexiones sobre como un joven se enfrenta al futuro, a los retos que le representa y como se puede dar incluso el miedo a los sueños. Luego vendría Puppet Master un episodio icónico al contar con las versiones puppet de Glee y una brillante reflexión sobre como ser un líder implica acercarse a la barrera de ser un controlador, lo cual requiere inteligencia para no cruzarla y mucho menos seguirse.

Tuvimos ese raro y extraño especial de Navidad (que además parece que será el último que se produzca). Tras ello vendría el break de dos meses que terminaría con Frenemies donde serían exploradas las dinámicas de amistad de Santana y Rachel así como las siempre brillantes apariciones de Adam Lambert como Elliot Starchild, que continuaría en Trio, donde se uniría junto con Demi Lovato, otra brillante adición a ésta temporada.

Todo ello pavimentando el capítulo para tres capítulos impresionantes, City of Angels, las últimas nacionales del club en las cuáles quedarían en segundo lugar llevando de forma inminente a que Sue cumpliera su amenaza de cerrar New Directions. Ello sería la antesala para dos episodios épicos, 100 y New Directions, los cuales en conmemoración de la centena de episodios serían el cierre de una etapa muy relevante en Glee, la ubicada en Lima, Ohio, con el cierre de New Directions, la reversión de grandes reversiones de Glee y el regreso de dos invitadas muy especiales, Kristin Chenoweth y Gwynelth Paltrow así como el regreso de toda la banda de clásicos. 

Ello sería el puente a los siete episodios finales, en los cuales daríamos un salto en el tiempo para finalmente ajustarnos a los tiempos que sucedían en pantalla con los reales y que significarían la reducción del elenco a apenas siete personajes, Rachel, Kurt, Santana, Mercedes, Sam, Artie y Blaine. Y así llegaron historias más sencillas y humildes, menos estruendosas. 

Tuvimos un genial y divertido New New York que sentó las bases para ésta nueva etapa, vino después Bash, donde el tema de la violencia y el acoso homofóbico fue llevado de las escuelas al mundo real, Tested por su parte habló en tono cómico de las enfermedades de transmisión sexual pero más importante puso una vez más a prueba la relación de Kurt y Blaine al enfrentarlos a nuevas situaciones que cambian el estado de su relación. 

Tras ello vendría uno de los momentos cumbres de la serie en Opening Night, donde Rachel finalmente alcanzaría su sueño de interpretar a Fanny Brice en el revival de Funny Girl, un momento estelar único que de inmediato cambiaría en The Back Up Plan donde Rachel empezaría a coquetear con la idea de buscar nuevos horizontes descubriendo que quizá Funny Girl no era el sueño de su vida, sino sólo uno más. 

Así vendría Old Dog, New Tricks, uno de los episodios más fabulosos de Glee, escrito por Chris Colfer, nuestro querido Kurt, que nos traería de regreso al Kurt inseguro ante ahora la vida además de muchos adorables ancianos y tiernos perritos huérfanos. Para finalmente así llegar a The Untitled Rachel Berry Project, el final de temporada que acomodaría algunas cosas pero primordialmente tendría a Rachel a punto de un nuevo capítulo en su vida, el de realizar un piloto en Los Ángeles para la televisión. 

A nivel de personajes, sin duda la perdida de Finn fue completamente lamentable para la serie, que perdió de alguna manera la conexión que los unía y enlazaba. A Finn, a quien se le recordó varias veces en la serie, se le extraña mucho. Montones, nada es lo mismo sin, pero la vida sigue. 

Algo que extraño en éstos episodios de Nueva York es al elenco más joven de la serie, la acidez deliciosa de Kitty, la tímidez de Marley, la buena onda de Ryder, las locuras de Unique y la fuerza másculina de Jake. De nuestros queridos personajes, es hermoso ver triunfar a Rachel y verla ser la estrella que siempre ha sido,  a Santana ser una perra que sigue buscando su camino, a Artie crecer y dejar sus miedos relacionados con su discapacidad, a Mercedes regresar y construir su carrera, a Quinn (Dios! como amo a Quinn) regresar bella y hermosa e iniciar una nueva aventura con Puck, a Tina ser esa amiga raro que todos tenemos y adoramos, a Kurt enfrentar sus miedos y salir adelante, a Sam convertirse en todo un hombre y en especial a Blaine. 

No sólo amo locamente a Blaine porqué estoy completamente enamorado de Darren Criss. Amo a Blaine porqué me identifico de tantas formas con el personaje. Tanto en sus puntos buenos como en sus puntos malos. Ver a ese chico imperfecto, con obsesiones, con manías, con miedos, con fortalezas y con talentos. Muchos de los cuales comparto, es algo francamente invaluable.

Derivado de los bajos niveles de audiencia se ha anunciado que la sexta temporada de Glee, la que se sabe es la final, será emitida hasta la midseason, es decir, cuando menos hasta enero de 2015, y que probablemente la orden de episodios sea reducida de los 22 ordenados. Sea como sea, Glee se encuentra en una impecable posición para cerrar su recorrido de seis años, con el mismo corazón, entrega y energía con el que lo ha venido haciendo. 

La quinta temporada de Glee fue una temporada de total transición, el cierre de las tramas escolares y el inicio de la vida real, de la vida fuera de la escuela de nuestros queridos personajes. Tal y como en la misma vida, Glee ha crecido con su público, que aunque quizá sea menos, sigue emocionandose y vibrando cada semana con las historias, los momentos, las risas y las lágrimas de éstos queridos personajes. 

La sexta temporada de Glee sin duda será un maremoto de emociones, habrá risas, lágrimas, nostalgia, catarsis y alegría. Estamos lista para ella. Ha sido un viaje extraordinario, y el cierre lo será más. 

Gracias por una gran quinta temporada Glee. Estamos listos para decir adiós. 

Y en la próxima madeja: Review de X-Men Días del Futuro Pasado.

domingo, 18 de mayo de 2014

Demi Lovato - Neon Lights Tour

La Madeja del Gato (cual luz neón)
Madeja #264
Por Christopher Vergara

Justo en la semana en que celebró un año del lanzamiento de Demi, su cuarto álbum de estudio además de lanzar el cuarto sencillo de ese álbum, Demi Lovato pisó por tercera ocasión suelo azteca para presentar su espectáculo Neon Lights Tour, ésta vez desde la Arena Ciudad de México ante poco más de doce mil personas. 

La anterior vista de Demi a nuestro país se dio en el marco de la promoción de Unbroken, su anterior álbum lanzado tras su proceso de tratamiento en una clínica para tratar sus diferentes padecimientos mentales y adicciones. Unbroken era en general un álbum mucho más íntimo reflexivo comparado con Demi que es una colección de momentos de toda índole, donde cabe desde la reflexión y la fuerza interna hasta la celebración, el amor y la travesura. No es que sean albumes contrarios, es que Demi es el paso natural a Unbroken, como la paz y la diversión que llegan una vez que has puesto tus asuntos en orden. 

Más o menos así se siente Neon Lights Tour, un espectáculo explosivo y divertido que sin embargo tiene momentos de gran profundidad. En muchas formas se siente como una consolidación completa de la carrera de Lovato, donde ya no es aquella niña Disney, ni tampoco aquella chica que estaba saliendo de sus problemas. Demi es hoy una artista completa, que si bien conoce los peores demonios propios, tiene fuerza para vencerlos e intentar inspirar a su público. 

En punto de las 21:40 horas, Lovato inició su concierto con Heart Attack, que de inmediato capturó al público que se rindió ante ella, entonando los frenéticos coros de la canción producida por Mitch Allan y Jason Evigan, para después dar paso a Remember December, en un arreglo que aunque pierde la explosividad rockera del original gana toques soul, probablemente labor de Nick Jonas, director musical de la gira. Tras ello dio paso Fire Starter, uno de los cortes más rockeros y atrevidos de Demi,y luego The Middle, ambos cortes puramente rockeros que muestran los inherentes gustos músicales de Lovato.

Para ésta ocasión, Demi estuvo acompañada de dos coristas (una chica afroamericana y otra blanca), y cuatro músicos, dos guitarristas, un tecladista y un baterista. Todos sobre un sencillo escenario rectangular con cuatro cuadrados base para los instrumentos, una pantalla rectangular de fondo donde se proyectaron animaciones y videos y un potente juego de luces de todo tipo, tanto a los lados de la pantalla como encima del escenario. Una maquina de humo y papeles de colores fueron además utilizados. Una escenografía sencilla aunque más elaborada que la de su anterior visita, que sin embargo es mucho más ligera a la utilizada en los conciertos del Neon Lights Tour por Estados Unidos. 

Tras ello vino un gran momento de fiesta, con Really Don't Care, recientemente anunciado como cuarto sencillo de Demi, un corte totalmente pop que mostró a una Demi divertida, alegre y despreocupada, enmarcada en uno de los momentos más naíve del juego de luces (en tonos pasteles) que anuncian que sin duda el video de la canción va a ser completamente divertido. Really Don't Care es una canción que pese a hablar de desamor lo hace con gran ritmo y energía. 

Posteriormente siguió el momento acústico de la noche con Catch Me, una de las baladas más sencillas pero hermosas de Lovato, compuesta al alimón con Nick Jonas, sobre un amor que crece de tal manera y prisa al cual es imposible escapar sobrando decir que la interpretación de Lovato es completamente dulce y honesta. La otra pieza de éste setlist fue Here We Go Again, sencillo debut y título de su segundo disco que sin embargo recibió una completa transformación para convertirse en una desoladora balada sobre un amor al cual no se puede escapar. 

Tras ello vino otro momento estelar de la noche con Made in the USA, la patriótica canción de amor que Demi logró convertir en universal mediante un amor que no importa lo que suceda no morirá, incluyendo el bonito detalle final de estar 'Made in Mexico'. 

Un gran momento cumbre vino con Nightingale, la asombrosa balada de Demi, en la cual Lovato cerca del final tuvo un momento vocal impresionante en el cual demostró que no unicamente es una estrella pop por derecho, sino además es poseedora de una voz fantástica y con un gran rango potencial. Nightingale sin duda quedará siempre en mis recuerdos. 

La estupenda Two Pieces fue el puente para el discurso más largo de la noche de Lovato, Demi nos dijo que probablemente ya estaríamos hartos de qué contará su historia pero habría siempre alguien que no la había escuchado. Nos dijo que ella intenta que a través de su música hable de cosas que puedan ser útiles a otros, nos dijo que si había alguien que estuviera sufriendo de bullying, anorexia, cutting, o alguna otra enfermedad mental, supiéramos que hay caminos y alternativas más sanos para enfrentarlos. Para ella, su escudo es su música, la cual le permite salir adelante y enfrentar los problemas. 

Nos dijo que siempre persiguiéramos nuestros sueños, que así podríamos enfrentar todo, que ella creía en nosotros. Tras ello interpretó Warrior

Este set de tres canciones fue un momento definitorio en el show, pues tras el Lovato se sintió muy relajada, contenta y feliz, auténticamente feliz y contenta, se notaba en su sonrisa, en su voz, en una alegría difícil de ocultar. 

Otro momento espectacular vino con Let It Go, la icónica canción de la banda sonora de Frozen, la película animada de Disney. Lovato invitó a dos pequeños, un niño de nueve años y una niña de seis al escenario para cantar con ella, ahí Emiliano le regaló una pequeña hoja con las fotos de ambos, y señalando que es su fan número uno. Tras ello, doce mil almas replicaron la insigne canción de Elsa, la reina de las nieves. 

Demi continuó la noche con Don't Forget, una canción donde se le vio entusiasta y muy feliz, lo cual resultó ciertamente enternecedor. Tomando en cuenta que la canción es básicamente una balada triste, Lovato la cantó con una alegría y felicidad inesperada pero contagiosa. 

Ello dio paso a un agradecimiento por estar con ella todos éstos años a través de un montaje de sus videos desde This Is Me hasta Neon Lights, la presentación de la banda y Got Dynamite, otro momento rockero de la noche. Luego continuó con la fantástica Unbroken, canción que da título al disco del mismo nombre y que sin duda puso a todos a bailar.

Y entonces vinieron las luces neón y la Arena Ciudad de México enloqueció con Neon Lights. Una de las canciones que más disfruté de la noche y que me tuvo gritando y saltando como poseído. Esa fue la salida en falso. 

Una serie de recortes televisivos de diferentes noticieros dando cuenta de el punto de quiebre de Demi en octubre de 2010 cuando decidió internarse para tratar sus problemas fueron el puente hacía Skyscraper, la hermosa balada de superación que además tuvo como toque un par de estribillos de su versión en español.

El cierre definitivo llegó con otro corazón, pero este no en ataque, sino en descanso, Give Your Heart a Break, el éxito pop del 2012 sirvió como conclusión a una noche donde Demi Lovato hizo vivir a más de doce mil almas, toda la gama de sensaciones posibles, amor, desamor, tristeza, alegría, superación, inspiración... A las 22:55 Demi se despidió finalmente del escenario.

Gracias Demi, gracias por una noche única y auténtica donde no sólo brillamos como luces neón, y nos elevamos como un rascacielos, sino donde la música, nos recordó que es el lenguaje universal, al conjuntar los sueños, esperanzas y aspiraciones de miles, en especial de nosotros, tus Lovatics, quienes vemos en ti, a una artista y un ser humano que nos inspira y enorgullece por su enorme fortaleza. 

Stay strong. 

El Último Hilo: 
A. La apertura del evento corrió a cargo de The Rosso Sisters, un cuarteto de hermanas, manejadas por Kevin Jonas Sr. (con todo y Big Rob de guardaespaldas). Nada mal lo hicieron las chicas. Aunque recurrieron al playback, tienen una energía bastante divertida y en especial son sumamente carismáticas, a través de su setlist de canciones supieron ganarse al público.

B. El setlist de la noche:
1. Heart Attack
2. Remember December
3. Fire Starter
4. The Middle
5. Really Don't Care
6. Catch Me
7. Here We Go Again
8. Made in the USA
9. Nightingale
10. Two Pieces
11. Warrior
12. Let It Go
13. Don't Forget
14. Got Dynamite
15. Unbroken
16. Neon Lights
17. Skyscraper
18. Give Your Heart a Break

Y en la próxima madeja: Review de X-Men Días del Futuro Pasado.

domingo, 11 de mayo de 2014

El nuevo pleno del IFAI

La Madeja del Gato (transparente)
Madeja #263
Por Christopher Vergara

En el transcurso de la próxima semana tomarán protesta los siete nuevos comisionados del Instituto Federal de Acceso a la Información Pública y Protección de Datos que sustituirán al actual pleno de cuatro comisionados con lo cual se dará inició a una nueva etapa constitucional del Instituto el cual se transforma del organismo descentralizado no sectorizado que hasta el día de hoy, en un nuevo organismo constitucional autónomo, en virtud de la reforma constitucional del 7 de febrero de éste año que en muchas maneras cristaliza añejas demandas de los expertos en transparencia y protección de datos. 

A diferencia del proceso de designación que se siguió con los Consejeros del Instituto Nacional Electoral, el proceso de designación de los consejeros del IFAI, establecido dentro del artículo sexto que regula al Instituto sólo establece la facultad del Senado para designar a los comisionados 'tras una amplia consulta a la sociedad', así como la posibilidad del Presidente de objetar el nombramiento de los mismos. 

Es decir, el mecanismo de designación establecido en la Constitución es muy similar al que establecía el anterior texto constitucional para el Instituto Federal Electoral. La señalización aquella de la 'amplia consulta a la sociedad', en términos prácticos puede significar nada. 

El Senado para curarse en salud estableció un comité de expertos, integrado por reconocidas personalidades en la materia como Jacqueline Peschard, Mauricio Merino, Sergio López Ayllon, Pedro Salazar Ugarte, Issa Luna, Eduardo Bohorquez, entre otros. El mismo comité entregó al Senado una lista de veinticinco candidatos idóneos para el puesto. De los siete comisionados, seis salieron de esa lista, lo cual obviamente generó desencuentros y críticas al comisionado ajeno a la lista. 

El problema de éste proceso de designación es exactamente que aunque se intentó emular el exitoso proceso de designación del INE (que en muchas formas matizó el cuotismo de los partidos así como legitimó a los consejeros electos), el hecho de que no haya obligación constitucional para realizarlo, llevó a que mno se siguiera con la pulcritud debida, además de que no existía ninguna vinculatoriedad para la toma de decisiones más que la mera voluntad de los Senadores integrantes de las comisiones que elaboraron el dictamen.

Pese a todo ello, en general se eligieron buenos candidatos. Al menos mucho mejores que los comisionados que se van, pues salvo Ángel Trinidad Zaldivar que se desempeñó con integridad y ética en el Instituto, los otros tres son un grupo de holgazanes irresponsables. Sin embargo, tampoco se puede negar la claridad de los apoyos o padrinazgos recibidos por los siete comisionados, tres impulsados por el Revolucionario Institucional, dos por Acción Nacional y dos por el PRD. 

Por un periodo de nueve años hasta 2023 fue designados Francisco Javier Acuña Llamas, es Licenciado en Derecho y Doctor en Ciencias Políticas y Sociología, desde 2006 labora en el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, fue impulsado por Acción Nacional. 

Por ocho años, hasta 2022 fueron electos Oscar Guerra Ford y Rosendoevgueni Monterrey Chepov, el primero fue impulsado por el PRD y el segundo por el PRI. Ambos son economistas y actualmente presidían los respectivos plenos de los institutos de transparencia del Distrito Federal y del Estado de México. Monterey fue el comisionado electo ajeno a la lista que entregó el comité de expertos. A el se le critica especialmente su cercanía con el Secretario de Hacienda, Luis Videgaray, al desempeñarse en la Secretaría de Finanzas del Edomex. 

Por un periodo de seis años, hasta 2020 fueron designados Patricia Kurczyn Villalobos y Joel Salas Suárez. Kurczyn llega impulsada por el PRI (es esposa de un ex-gobernador poblano, aunque dicen que también la impulso Rafael Moreno Valle) y es una catedrática de larga trayectoria en la Facultad de Derecho de la UNAM e Investigadora en el Instituto de Investigaciones Jurídicas también de la UNAM. Salas Suárez es claramente una carta de Acción Nacional, Politólogo que laboró en el sexenio de Felipe Calderón en la Secretaría de la Función Pública. 

Por un periodo de cuatro años fueron designadas Areli Cano Guadiana y Ximena Mora de la Puente, la primera llega impulsada por el PRD y la segunda por el PRI. Cano Guadiana es licenciada en Derecho, actual directora de transparencia en la delegación Miguel Hidalgo y fue comisionada en el Info-DF. Mora de la Puente es doctora en Derecho y presidenta del Instituto de Transparencia del estado de Colima. 

Como podemos ver, los siete comisionados tienen experiencia en la materia, cuentan en su mayoría con altos grados de estudios, tres vienen directamente de institutos electorales de transparencia, una de la academia y tres más de la Administración Pública. Aun en el caso de Monterrey, quien no fue considerado como idóneo por el comité de expertos, cabría alguna posibilidad de darle el beneficio de la duda. 

El principal punto, más allá de que los perfiles sean en general idóneos, radica en incorporar a todos los procesos de designación de organismos constitucionales autónomos, o al menos de aquellos que tienen órganos colegiados, el proceso de designación establecido para el Instituto Nacional Electoral. Es decir, con la creación de un Comité Técnico de Selección integrado por expertos en la materia que se encargue de formular quintetas vinculatorias que se entreguen, en éste caso al Senado y que de ahí se designe a los comisionados. Y que en caso de que no se logre el acuerdo, deba insacularse a los comisionados.

El mecanismo de designación establecido en la Constitución para el INE resultó ser funcional y eficaz, lo mejor que podemos hacer es valorar una experiencia positiva y expandirla hacía otros institutos que requieren la misma legitimidad y nivel de acuerdo político que el INE, como el IFAI. 

Que mejor que dotar de legitimidad a los órganos que desde el momento mismo que se constituyen.

Y en la próxima madeja: Review a la temporada 6 de Glee.

viernes, 2 de mayo de 2014

La elección interna de Acción Nacional

La Madeja del Gato (política)
Madeja #262
Por Christopher Vergara

El Partido Acción Nacional se encuentra en plena campaña rumbo a su elección interna de Presidente y Secretario General a celebrarse el próximo dieciocho de mayo. Una elección histórica al ser la primera que se ha abierto a toda la militancia, a diferencia de anteriores elecciones que se decidían por el voto cupular del Consejo Nacional (irónico como los mecanismos de selección internos del PAN y el PRD se han invertido, cuando antaño fueron tan críticados por el otro). 

Como es sabido, por una parte compite Gustavo Madero, actual dirigente de Acción Nacional y quien busca su reelección, ésta vez acompañado por Ricardo Anaya, uno de sus operadores incondicionales como candidato a la Secretaría General. Por otro lado se encuentra Ernesto Cordero, senador con licencia del partido y Juan Manuel Oliva, ex-gobernador de Guanajuato como su acompañante de formula. 

La elección interna de Acción Nacional, la primera que viven tras la pérdida del poder, podría ser ejemplificada como un matrimonio en pleno proceso de divorcio, hay acusaciones de infidelidad, de falta de compromiso, de mentiras, de desatención, de cooptaciones económicas. Puro deslinde y achacamiento de culpas, ningún reconocimiento de errores. y lo más lamentable: una genúina y total falta de desinterés por el niño, perdón por el partido político. 

Es claro que son dos bandos completamente enfrentados que tras la derrota en la elección general de 2012 terminaron por romper la relación medianmente funcional que alguna vez tuvieron. Cordero representa y aglutina a los calderonistas y a el sector más conservador del Yunque, es decir, al grupo que estuvo en el poder entre 2006 y 2012, y cuyo lider moral, hoy en día profesor universitario, busca retomar el control del partido rompiendo con lo hecho por Madero. Calderón y seguidores tienen una visión netamente anti-príista, bastante radical y conservadora, con una interpretación muy rígida de los valores que le dan sentido al partido, en especial el hoy tan cacareado y mal entendido humanismo de Gómez Morín. 

Madero por su parte aglutina a el otro gran sector del partido. Los maderistas son básicamente los anticalderonistas, es decir todos (una gran cantidad) de marginados políticos que fueron alejados por Calderón y la visión tan radical y dogmática con que manejó o influyó en el partido. Es un grupo completamente variopinto, que incluye desde foxistas trasnochados, hasta los bárbaros del norte, incluyendo sectores menos radicales (lo que quiera que eso signifique) del Yunque y dicen que hasta a Margarita Zavala. 

Acción Nacional, a nivel interno se encuentra en la espiral de decadencia y podredumbre que necesariamente le sigue a un cambio tan radical como lo es la perdida del poder. Todo partido político que pierde el poder transita por un periodo donde se encuentra 'perdido', como un insecto al que le rocían con insecticida. Más que el partido, sus liderazgos se encuentran perdidos, confundidos, desconectados, sin saber que hacer con el partido. 

Lo que le sucedió a Acción Nacional es un problema muy grave: ha perdido completamente la noción de para qué quiere existir. Eso no se soluciona con frases vacías como 'ser una oposición' o 'seguir construyendo un México justo y equitativo'. Además de ello arrastra los vicios y las consecuencias de su ejercicio en el poder, lo cual incluye la vasta cantidad de cloacas de corrupción que se están conociendo. En pocas palabras, no saben quienes son, sólo tienen presente su oscuro pasado y ya no recuerdan porqué existen. Un coctel bastante podrido. 

Ambas formulas tienen argumentos valiosos en sus respectivas al contrario, pero también carecen de la más elemental autocrítica. Lo que es peor, ambas formulas no garantizan de ninguna manera que sean el equipo necesario para sacar al panismo del marasmo en el que se encuentra. Ambos tienen diagnósticos correctos pero muy parciales, y las visiones políticas son completamente sectorizadas hacía sus fieles, lo cual excluye prácticamente medio partido. 

Lo que Acción Nacional requiere, es practicamente lo mismo que requieren los otros dos grandes partidos, aunque los síntomas son más notorios en el PAN (quizá porqué el PRI está en el poder, y porqué para el PRD son problemas estructurales que le vienen de orígen). Requiere por un lado repensar su ideología y sus razones de existencia, es decir, retomar la formación doctrinal e ideológica y por otra parte renovar los cuadros políticos del partido con sangre más joven que pueda escapar al proceso de deformación ética que se dio cuando el partido estuvo en el poder. 

La elección interna de Acción Nacional poco impacta realmente en la percepción que tiene la ciudadanía del partido, pero en sus militantes es otro triste capítulo en la historia tan deprimente que fue su estancia en el poder y lo es la desintoxicación del mismo. En otras palabras, Cordero y Madero deberían pensar en sus militantes y dejarse de niñerías y bravuconerías políticas e inservibles. 

Y en la próxima madeja: Review de Liv & Maddie.